Esta imagen la tomé en mi casa en una especie de estudio fotográfico improvisado. La piedra la recogí de la playa mientras daba un paseo con mi familia. Hace tiempo estaba muy centrado en la fotografía de aves, pero las circunstancias han hecho que no pueda tener acceso a esas joyas aladas como antaño. Este es el motivo que me movió a buscar nuevos motivos y horizontes en la fotografía de naturaleza y me ha abierto un amplio campo creativo.
El título de esta imagen es Un sueño mediterráneo. En ella he buscado la estética impresionista jugando sólo con los colores y reduciendo el foco a su mínima expresión. Esa atmósfera de neblina pretende darle ese aire de ensoñación referido en el título. Este efecto se ha obtenido exponiendo en clave alta. Las flores fotografiadas se reconocen fácilmente, son nuestras silvestres viboreras tan típicas de nuestro paisaje mediterráneo.
No sólo la flora silvestre tiene su espacio en mi temática, también esta barroca inflorescencia de jardín me hace disfrutar de ratos de contemplación y trabajo fotográfico. Esta planta se encuentra en los románticos Jardines de Murillo de Sevilla y no recuerdo haberla visto en otro sitio. En estos jardines hay mucha flora procedente de la América hispana de la que Sevilla era su puerto en Europa. Muchas plantas tropicales se adaptan aquí a las mil maravillas debido al cálido clima sevillano y a la humedad de su suelo y de la atmósfera (la ciudad está muy próxima a las marismas del río Guadalquivir).
Cambiamos de tercio, nos vamos a la playa:
Fotografiar las olas es algo que siempre me oxigena, me da vida. Disfruto mucho con la contemplación de esas esculturas efímeras y únicas. Estas caprichosas formas de esos fugaces instantes no vuelven a repetirse nunca más. Es eso lo que lo hace aún más bello y mágico.
Bien cierto es que la cabra tira al monte, por eso, siempre que tengo la oportunidad de fotografiar estas joyas aladas no lo pienso dos veces y me dispongo a capturar esos instantes de cercanía con ese mundo maravilloso...
Me encanta la elegancia de esta Lechuza Común. Y el Búho Real es realmente imponente por su gran tamaño y su mirada soberbia.
Me encontré a estas dos rapaces en medio de la feria de un pueblo y no pude resistirme a sacar la cámara y retratarlos aunque las condiciones no eran las idóneas para ello.
Un saludo con alegría desde Andalucía. Espero que os haya gustado esta nueva entrada.
El título de esta imagen es Un sueño mediterráneo. En ella he buscado la estética impresionista jugando sólo con los colores y reduciendo el foco a su mínima expresión. Esa atmósfera de neblina pretende darle ese aire de ensoñación referido en el título. Este efecto se ha obtenido exponiendo en clave alta. Las flores fotografiadas se reconocen fácilmente, son nuestras silvestres viboreras tan típicas de nuestro paisaje mediterráneo.
No sólo la flora silvestre tiene su espacio en mi temática, también esta barroca inflorescencia de jardín me hace disfrutar de ratos de contemplación y trabajo fotográfico. Esta planta se encuentra en los románticos Jardines de Murillo de Sevilla y no recuerdo haberla visto en otro sitio. En estos jardines hay mucha flora procedente de la América hispana de la que Sevilla era su puerto en Europa. Muchas plantas tropicales se adaptan aquí a las mil maravillas debido al cálido clima sevillano y a la humedad de su suelo y de la atmósfera (la ciudad está muy próxima a las marismas del río Guadalquivir).
Cambiamos de tercio, nos vamos a la playa:
Fotografiar las olas es algo que siempre me oxigena, me da vida. Disfruto mucho con la contemplación de esas esculturas efímeras y únicas. Estas caprichosas formas de esos fugaces instantes no vuelven a repetirse nunca más. Es eso lo que lo hace aún más bello y mágico.
Bien cierto es que la cabra tira al monte, por eso, siempre que tengo la oportunidad de fotografiar estas joyas aladas no lo pienso dos veces y me dispongo a capturar esos instantes de cercanía con ese mundo maravilloso...
Me encanta la elegancia de esta Lechuza Común. Y el Búho Real es realmente imponente por su gran tamaño y su mirada soberbia.
Me encontré a estas dos rapaces en medio de la feria de un pueblo y no pude resistirme a sacar la cámara y retratarlos aunque las condiciones no eran las idóneas para ello.
Un saludo con alegría desde Andalucía. Espero que os haya gustado esta nueva entrada.
En efecto D. Enrique, te ha quedado muy, pero que muy bien. Enhorabuena por el trabajo realizado. Si FN te cierra las puertas, con el blog, abres un mundo de encuentro con el resto del mundo.A partir de ahora, haz un paréntesis y vuelve con alegría, una vez conseguidos los objetivos. Un abrazo.
ResponderEliminarBuenas Enrique. En primer lugar decirte que las fotos están muy bien. Los fe FN creo que ya no tiene remedio, de todas formas ponerte Kike Choquet y firmar las fotos con todo tu nombre no era pasar desapercibido precisamente...en fin que es una pena no tenerte dentro de nuevo.
ResponderEliminarA seguir en contanto por el Blog. Un abrazo fuerte